Mayer Mizrachi está más feliz que niño en fiesta de cumpleaños. Por fin, después de casi 10 años, puede visitar la tumba de su abuelo en Kingston, Jamaica.
El alcalde electo, quien debe asumir el cargo a partir del 1 de julio estaba emocionado y maravillado de ver lo bello que está el aeropuerto internacional de Tocumen y hasta de los altos precios en el Dutty Free. De hecho, hasta las largas filas le parecieron hermosas.
Con un poco de aprehensión por la revisión de sus documentos en Migración, Mizrachi no pudo esconder su felicidad cuando de una manera sencilla y tras verificación de su pasaporte le dieron el go para salir de Panamá.
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Este es el primer vuelo un internacional que hace el empresario y obviamente se fue con sus hermano y su madre.
Ya en el avión aseguró: “Yo no puedo creer que estoy viviendo este momento ahora mismo”, dijo mientras explicaba que por fin vería la tumba de su abuelo en Kingston Jamaica.
Dejó claro que no es un viaje de placer sino más bien un viaje de catarsis: “donde voy a cerrar una saga de mi vida para empezar un nuevo capítulo, no solo en mi vida pero en la historia patria”.
Prometió que lo que hará a partir del 2 de julio en Panamá será más que ponerla a brillar: “vamos a hacer justicia por lo que nos merecemos como ciudad, como ciudadanía, como pueblo panameño”.
Agradeció la confianza de las más de 163 mil personas que le dieron su voto de confianza e hicieron posible que su escenario hoy sea tan distinto.
